Objetivos y beneficios

      La musicoterapia se puede emplear con los más pequeños, como por ejemplo niños que presenten dificultades en el aprendizaje, problemas de conducta, trastornos profundos en el desarrollo, niños con deficiencia mental, con dificultades de socialización, con baja autoestima, etc.  También con adultos y con personas de la tercera edad que presentan diferentes problemas, como por ejemplo que padezcan enfermedades degenerativas debidas a la edad como el Alzhéimer, problemas de fármaco dependencia y abuso de sustancias, que padezcan daño cerebral debido a enfermedades o traumatismos, incapacidades físicas debidas a enfermedades degenerativas o accidentes, problemas de dolor agudo o crónico o personas con enfermedades terminales.También se usa con personas que no están enfermas ni tienen ningún problema, simplemente para mejorar su bienestar personal, desarrollar la creatividad, mejorar el aprendizaje, sus relaciones interpersonales, así como para el manejo del estrés, como apoyo en el proceso del parto de las mujeres, para aumentar la creatividad y la capacidad de resolver problemas o para mejorar la autoestima, entre otros. Entre los objetivos generales podemos destacar:

•   Restauración, mantenimiento y mejora de la salud física y mental.
•  Tratamiento de enfermedades, alteraciones o incapacidades.
•  Aliviar problemas específicos del paciente.
•  Ayuda a la rehabilitación
•  Apoyo a la educación, entrenamiento, aprendizaje y reeducación.
•   Mejora y mantenimiento de destrezas en áreas académicas, lenguaje, comunicación, socialización, desarrollo motriz y funcional, uso sensorial y cognitivo y terrenos afectivos
•   Mayor desarrollo y crecimiento estableciendo, mejorando o modificando las funciones cognitivas, emocionales, físicas y sociales.
•   Promocionar el bienestar o la salud.
•  Mejorar el funcionamiento en la sociedad, incluyendo integración o reintegración al entorno social normal, resocialización y un ajuste más apropiado.
•   Facilitar el diagnóstico de enfermedades
•  Establecer una relación terapéutica o canal de comunicación o interacción.
•  Mejorar el concepto de uno mismo
•   Aprender las destrezas necesarias de la vida
•   Promover la auto-actualización que puede incluir el descubrimiento de los recursos y potenciales y el desarrollo y mantenimiento del potencial máximo.
• Obtener cambios deseados en el comportamiento o la conducta, que podrán incluir el manejo del comportamiento y la modificación de comportamientos inaceptables y los procesos de aprendizaje inefectivos.
•    Transformar o influenciar la personalidad
•    Facilitar la psicoterapia
•    Ayuda fisiológica, psicológica e integración emocional del individuo durante el tratamiento.
•    Desarrollar la expresión musical o la libre auto-expresión.

Sin embargo, estas diferencias de objetivos han dificultado el establecer límites claros para el campo, planteando problemas de identidad. Al analizar esto, parece que la Musicoterapia cambia su identidad de acuerdo a la población con la que se trabaja, al encuadre clínico y a la orientación del tratamiento. 

                ¿PODRÍAMOS APLICAR MUSICOTERAPIA EN EL AULA?

            La musicoterapia solo puede ser aplicada por un profesional. En nuestra entrevista con el musicoterapeuta, Manuel Martín enfatizó en este aspecto. En una sala de musicoterapia se crea un setting, es decir, un contexto especial que es favorable para trabajar esta disciplina. Sin embargo, aplicándolo en el aula perdería esa esencia tan importante.
        Siempre podremos utilizar la música en clase, pero no utilizar la música como terapia.